Relato erótico titulado:
"Mis amigas Lesbi"

Desde muy pequeño tengo facciones y cuerpo de mujer, desde la pubertad soy lampiño con escaso vello púbico y genitales muy pequeños esto hacía que me molestaran los compañeros de clase. Cuando entré a la universidad mis únicas amigas eran un par de chicas lesbianas con quienes compartíamos todo. Ellas tenían un aparta-estudio muy bonito y muy bien situado por lo tanto bastante costoso.
Las visitaba con frecuencia y compartíamos con música y licor, me fascinaba con la ternura que se trataban y sus caricias amorosas me excitaban mucho. Algunas veces me quedaba en su apartamento durmiendo en un sofá enfrente del baño desde donde las veía orinar pues no cerraban la puerta esto me encantaba y en la noche escuchaba los gemidos de sus noches de placer. Era feliz revisando sus ropas íntimas a día siguiente todas mojadas y con fuerte olor a perfume, como yo tenía solamente algunas materias que cursaba tenía mucho tiempo libre y remanecía con frecuencia en su apartamento. Algunas veces me probaba las prendas interiores de ellas y sus vestidos pues tengo un cuerpo muy similar eso me causaba mucha excitación y placer.
Como les estaba costando demasiado el alquiler me propusieron que me trasladara a su apartamento para contribuir a la renta, me pareció buena idea y me pasé al apartamento inicialmente durmiendo en el sofá, pero después en vista de que era muy incómodo me organizaron una pequeña cama en la alcoba de ellas, me dijeron que como yo conocía de sus inclinaciones no había ningún problema. Las noches eran para mí un gran placer por lo que veía y oía de ellas, me producía mucha excitación.
En las mañanas les preparaba el desayuno, lavaba la loza y limpiaba el apartamento.
Una noche en medio de los tragos me propusieron vestirme de chica a lo cual accedí, me maquillaron, me pusieron ropa interior, minifalda y sandalias estaba encantada y me pusieron nombre de nena me llamaban Sonia baile con ellas, nos besamos y acariciamos termine durmiendo con una pijama baby-doll y en tanga.
al día siguiente durante el desayuno me dijeron que porqué no seguía vistiéndome de chica todo el tiempo lo cual me encantó y me proporcionaron ropa íntima y vestidos de ellas de esa manera era una más de ellas me maquillaba, perfumaba y seguía haciéndoles el desayuno y arreglando el apartamento, pero ya vestida de chica diariamente.
Lo que pasará después se los contaré en mi próxima entrega de esta crónica.
Muchos besos